Una vida iluminada
Andrés Habegger
Dos pasiones algo anacrónicas se suceden en los días de Arturo “Tucho” Lazlo: la música de la vasta colección de vinilos que giran en su tocadiscos y las pinturas que realiza en un taller colectivo. La primera pasión parece lógica considerando la condición actual de Tucho: la ceguera. La pintura, en cambio, no es una tarea que le pueda resultar fácil; por el contrario, es un desafío asumido cuadro a cuadro que le permite relacionarse con el universo visual que una decisión trágica le negó terminantemente. Esta película-retrato sigue las experiencias diarias de Tucho en su conexión con el mundo, desde su arte hasta su malestar, con un presente que evoca un pasado macabro en primer plano. Sin desvíos y sin enturbiar el peso específico de los momentos cotidianos, Andrés Hebegger logra registrar la tensión y el reposo, la tristeza y la esperanza, la banalidad y el genio del mundo de Tucho, sin nunca ser condescendiente ni meloso, buscando siempre la distancia justa. (Bafici)
Ficha Técnica